Altura

 


Crece, hiedra salvaje, elévate hasta donde alcancen tus hojas. Ignora hosquedades, piedras y vendaval, que para cuando rujan las antífonas como perros rabiosos tú ya no podrás oírlas.

Comentarios

Entradas populares de este blog

LA VIDA QUE NUNCA TUVE

IN-TERROR-DUMBRE ADELFA NEGRA

TRES HISTORIAS NAVIDEÑAS