EL DESPERTAR DE LOS DIOSES

 

Cuando Belinda me confió el manuscrito de “El despertar de los dioses” para una lectura previa a su publicación, me sentí tremendamente honrada. Y más aún cuando me pidió que escribiera el prólogo de esta obra que, desde la primera página, prometía una experiencia inolvidable.

En la antigua Grecia se creía que el destino de los mortales estaba escrito por las Moiras, y que ni siquiera los dioses podían alterarlo. Partiendo de este concepto, nos vamos a centrar en la historia de una joven estudiante de Filosofía, Adara Áristos, que descubre que está destinada a jugar un papel crucial en una profecía milenaria que conecta el pasado con el presente. Pinta bien, ¿eh?

Me impactó el profundo conocimiento en mitología griega que tiene Belinda, pero sobre todo el modo en que ha sido capaz de mezclar elementos clásicos y la realidad social presente. Y la tía lo hace sin despeinarse. Aquí hay creatividad para dar y regalar, así que no esperes encontrarte un libro técnico o carente de emoción, porque no es el caso.

“El despertar de los dioses” es una celebración de la mitología como un espejo de la humanidad. A lo largo de sus páginas vas a encontrar temas tan universales como el poder, la identidad, el amor, la lucha contra el destino... A través de Adara y un elenco diverso de personajes, la novela nos muestra cómo incluso en un mundo de dioses y poderes sobrenaturales, las emociones y decisiones humanas siguen siendo necesarias.

Aventuras, enigmas, acción, alianzas, descubrimientos… En cada capítulo vamos a acompañar a Adara y sus compañeros a enfrentar sus propios miedos, a veces vestidos de sueños y secretos, a veces cargados de valor y humanidad. Héroes y villanos te van a llevar a un mundo donde todo, incluso lo incomprensible, tiene un porqué.  

Y sí, vas a gozar la épica, por supuesto, pero también llegarás a reflexiones acerca de la naturaleza humana, con sus defectos y virtudes; de hecho, siento que la novela es una manera perfecta de conectar a humanos y dioses en una ceremonia que señala a la mitología como un efecto de quiénes somos nosotros.

Este libro se debe leer con el corazón abierto, con la predisposición de un niño curioso y ávido de aventura. Personalmente, lo he vivido como un rescate sensorial, con el propósito de mantener viva la imaginación y permitirnos, aunque sea un ratito al día, soñar y creer en lo imposible.

Si buscas una historia que te desafíe a ver más allá del mundo ordinario y que además juegue con elementos mitológicos de un modo original y atractivo, “El despertar de los dioses” es tu libro.

Espero que Belinda reciba el éxito que merece. Se nota que ha depositado una parte muy bella de sí misma en este proyecto, y a mí me gusta que la gente luchadora, la que siembra sin descanso, recoja los frutos que merece.